La posibilidad de crear nuestros entornos personales de aprendizaje

Cuando recién se tenía acceso a  Internet, este se presentaba como una nueva biblioteca. Más de uno se acercó a este medio con el fin de obtener información. Con el pasar de los años, Internet nos ofrece un sinnúmero de formas de emplearlo. Así, hoy es posible no solo ser parte de un programa formativo a distancia (y romper así barreras de espacio y tiempo), si no que nos da la posibilidad de contar con nuestros propios programas formativos: nuestros entornos personales de aprendizaje. (PLE)

Así, por ejemplo, podemos de encontrar que más allá de las plataformas virtuales de las que se dispone en algunas instituciones educativas, también es posible hallar espacios virtuales, como Personal Learning enviroment framework (PLEF http://eiche.informatik.rwth-aachen.de:3333/PLEF/index.jsp), que ofrecen espacios para que cada persona plantee su propio espacio de aprendizaje. 

En estos espacios, es posible que cada uno de nosotros diseñe y gestione su propio aprendizaje. La interacción con distintas fuentes de información, espacios de discusión con otros, potencializan el aprendizaje de cada individuo, pero también hay que tener cuidado de los posibles riesgos. ¿Será fácil para un adolescente identificar estos riesgos? ¿Cuán libres y abiertos han de ser estos espacios para que sean efectivos realmente?

Es por ello, que si queremos que estos entornos personales de aprendizaje realmente sean aprovechados por nuestros alumnos, debemos dar ciertas indicaciones, ciertos acuerdos. El acceso a estos espacios permiten el desarrollo de habilidades de autoaprendizaje. 


En el siguiente vídeo, se nos muestra, de una manera sencilla, cómo funciona el uso de los PLE